La Asociación de Pescadores del Cares-Deva está a punto de concluir una nueva campaña de limpieza y adecuación de las márgenes fluviales. Lo hace de la mano de cinco ayuntamientos, los de Cabrales, Peñamellera Alta, Peñamellera Baja, Ribadedeva y el cántabro de Val de San Vicente. Los municipios aportan materiales y operarios, que ayudan en gran medida a los aficionados a la pesca a realizar estos trabajos para garantizar que, una vez que da comienzo la temporada, nada impide que la actividad se desarrolle con total normalidad.

Las labores se han ido desarrollando a lo largo de los últimos fines de semana y, para terminar todo el terreno a limpiar, solo resta este próximo. Para el final se ha dejado el concejo de Cabrales, donde el cauce en su zona alta ya está listo y para la zona baja se pretende trabajar estos días en los pozos de La India y El Cigarrillo. En Peñamellera Baja, el sábado se terminará de acondicionar los de El Tilo, Monejo y Collú.

El presidente de los pescadores del Cares-Deva, Nicolás Sánchez, valora el apoyo de los ayuntamientos «muy positivamente» y advierte de que «a las puerta del inicio de la temporada de pesca del salmón con muerte -que comienza el 24 de abril- son muy importantes estas actuaciones para tener acondicionados los accesos a los principales pozos». El pescador explica que, aunque estos trabajos se vienen desarrollando en los últimos años «gracias a los voluntarios y a los ayuntamientos», en esta ocasión la implicación ha sido mayor «y se ha podido trabajar mejor y más en profundidad».

Cauce del Sella

En el río Sella también se esperan trabajos de limpieza y retirada de residuos, aunque más adelante. El alcalde de Parres, Emilio García, apuntaba ayer que «suele ser hacia el mes de junio cuando operarios municipales y empresas de turismo activo nos reunimos para limpiar». Esta misma semana en Cangas de Onís se trabajaba para acondicionar el cauce del río Güeña, ante la importante presencia de plásticos.

Referencias

El Comercio